Al hablar de coeducación, es decir, educación en igualdad, lo que queremos
es romper con la transmisión tradicional de roles y estereotipos,
con la desigualdad, y apostar por una igualdad real entre hombres y mujeres y por
un futuro compartido y corresponsable tanto en la vida privada como en la
pública.
Desde la infancia son muchos los estereotipos y los roles que se adoptan
en casa o en el colegio. El colegio es una
de las áreas de socialización más importantes a la que niñas y niños se
enfrentan, y sin duda, el profesorado es una pieza clave para contribuir al
cambio.
A medida que pasa el tiempo y las personas crecen, las diferencias entre
hombres y mujeres van aumentando. Es necesario, por lo tanto, empezar desde la primera
etapa de la infancia. Educar en igualdad desde pequeños y pequeñas para evitar discriminaciones
que muchas veces no las perciben y que no son conscientes de ellas pero que es
importante que conozcan para crecer en igualdad. Es decir, romper con la
desigualdad de género.
En educación infantil es importante trabajar con materiales didácticos
como cuentos con los que se pretende que el propio alumnado se dé cuenta que los/as
protagonistas de la historia pueden ser diferentes a los que está acostumbrado y
romper así con el papel que tradicionalmente se les asigna tanto a los niños
como a las niñas.
Para ello, es muy importante el
lenguaje. Si empezamos con un lenguaje no sexista, si tenemos en cuenta el nombrar todo lo femenino, tanto en las profesiones como en los sentimientos en cualquier
tema que estemos tratando, además de los modelos de niños y modelos de niñas
que queremos… todo ello hace que el cuento sea más fácil de transmitir, convirtiéndose
como algo natural en sus vidas, más interiorizado.
Sin embargo, a partir de los 6 años, la estrategia para difundir el
mensaje de la igualdad de género cambia. El fomento de la utilización de los mismos juguetes para niños y niñas,
potenciar al alumnado con la posibilidad de que las profesiones son válidas
para ambos sexos o la ruptura de la asignación de las tareas domésticas, según
sea hombre o mujer, son algunas de ellas.
Es necesario que el mensaje llegue
a todos y todas y eso nos ayude que en un futuro no se hable más de la desigualdad de género.
En la actualidad sigue habiendo muchos estereotipos que existen en la adolescencia
y la diferencia entre hombres y mujeres aún es muy grande. La sociedad cambia con
el paso de los años y las nuevas generaciones se van adaptando a los nuevos tiempos.
Es necesario reforzar el mensaje de que la igualdad de género debe de existir
para que así en un futuro la diferencia entre hombres y mujeres apenas exista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario